La fibromialgia es un padecimiento complicado catalogado como crónico, en el que los músculos envían impulsos eléctricos de dolor al cerebro, pese a no estar presente ningún factor externo que lo cause.
Teóricos de las terapias biodescodificación de la fibromialgia, también explican que esto podría ocurrir a causa de factores psicológicos puntuales tanto hereditarios como desarrollados de forma particular por el individuo.
Pero lo cierto es que, aunque constantemente se realizan investigaciones con diferentes enfoques, no hay resultados concluyentes sobre las causas de esta enfermedad.
Razón por la cual, los doctores deben analizar muy bien las características de la sintomatología física, cognitiva y emocional presentadas por el paciente para poder diagnosticar un brote de fibromialgia.
¿Cuáles son los síntomas de la fibromialgia?
Algunos síntomas son más recurrentes que otros, dependiendo del organismo de cada persona, sin embargo los más comunes son los llamados puntos de dolor de la fibromialgia.
Los puntos de fibromialgia se presentan de forma regular en 19 zonas específicas que se encuentran a lo largo de los músculos, articulaciones, cabeza, cuello, espalda y extremidades. Esta es la razón por la cual, algunos pacientes indican un dolor difuso en los dedos de la mano a consecuencia de la fibromialgia.
De igual forma, existen otros síntomas como sensación de hormigueo e inflamación, adormecimiento en manos y pies, dificultad para conciliar el sueño, largos períodos de vigilia, rigidez muscular al levantarse, dolor intenso, mareos constantes, problemas de memoria, debilidad y fatiga.
La enfermedad puede presentarse en diferentes niveles o grados de fibromialgia, que van desde leve pasando por moderado, hasta severo. En este sentido, el paciente puede ubicarse en alguno de estos niveles, dependiendo de la manifestación y persistencia de sus síntomas:
- Leve: Los síntomas son controlables y se alivian con medicación.
- Moderado: Los síntomas y malestares se presentan más seguidos y requieren dosis más elevadas de medicamentos para tratarlos.
- Severo: Los síntomas son cada vez más fuertes y continuos, los medicamentos ya no surten efecto haciendo que el padecimiento impida el desempeño de las tareas diarias.
Qué examen hacer para saber si tengo fibromialgia
Como no se tiene certeza del origen de la enfermedad, pues no existen pruebas específicas como un análisis de sangre para detectar fibromialgia.
Lo más recomendable es acudir a consulta médica, para que un especialista le indique los estudios necesarios para descartar otros trastornos similares, antes de confirmar un diagnóstico de fibromialgia.
Cómo tratar la fibromialgia
El tratamiento farmacológico para fibromialgia debe ser recetado por un médico y regularmente incluye antiinflamatorios, relajantes musculares, antidepresivos, ansiolíticos, entre otros, dependiendo de cada caso.
También se combina con terapias complementarias como fisioterapia con aplicación de TENS para fibromialgia, masajes terapéuticos, terapia psicológica, terapia cognitiva, yoga y acupuntura.
La combinación de tratamientos y terapias buscan combatir las ondas de dolor que se intercambian entre el cerebro y los músculos, para ofrecerle alivio al paciente.
Asimismo, se recomienda contactar alguna asociación de fibromialgia para que le puedan brindar mayor apoyo e información sobre esta dolencia.
Referencias
- Lynne Matallana. 10 THINGS YOU MUST KNOW ABOUT FIBROMYALGIA | fmaware.org
- Mercè Piera. TRATAMIENTO DE LA FIBROMIALGIA | medicina21.com
- National Institute of Neurological Disorders and Stroke (NINDS). PAIN: HOPE THROUGH RESEARCH | ninds.nih.gov